Un maravilloso fiasco. La Laguna de Fuente de Piedra.

Lo sabíamos pero la afición nos pudo esta vez. Sabíamos que no es la mejor época del año para fotografiar aves y sabíamos que el primordial objetivo de nuestras ansiosas cámaras era captar la gran foto del año, con flamencos. ¡Craso error!

Nos dirigimos a Antequera distante unos 52 km de Málaga a eso de las 6 de la mañana y aprovechamos el viaje para acercarnos la zona de Las 7 Lagunas de Campillos. Ignorantes de la topografía del lugar, despistados por la negrura de la noche y la indefinición de nuestro GPS terminamos en la linde de un recién germinado campo de trigo varado el coche con barro hasta las cejas gracias a las intensas lluvias de los últimos días en esta zona de la provincia. El esfuerzo de salir del atolladero nos dejó pero que bien despiertos para el resto de la madrugada.

Ya en la Laguna de Fuente de Piedra comprobamos con cierto desánimo desde nuestro observatorio de aves que el nivel de agua no era el más óptimo. La variedad de la avifauna se reducía a contadas especies que distaban más de lo deseado de nuestras cámaras. Aún así y todo pudimos recrearnos con algunas tomas panorámicas del lugar y captar allí a lo lejos algunos grupos de flamencos rosas y gaviotas.

La Laguna de Fuente de Piedra resulta uno de los paraísos más atractivos para más de 170 especies de aves catalogadas, bien de paso o de las que la eligen para su apareamiento y nidificación. Es un lugar con más de 1.364 hectáreas de humedal salino y excelente para los interesados en la fotografía de naturaleza y de aves. En los meses de marzo a julio han llegado a contarse hasta 20.000 parejas de flamenco rosa.
En 1983 fue declarada como sitio Ramsar. El 11 de enero de 1984 se aprobó como reserva natural y en 1988 fue declarada como Zona de Especial Protección para las Aves.

Como salida estuvo fenomenal, disfrutamos de una climatología excelente y unos cielos nubosos y espectaculares y nos regalamos unos platos de callos exquisitos en el Restaurante Tejada de la cercana población Fuente de Piedra.

Así que nuestro maravilloso fiasco nos dejó las siguientes enseñanzas:
-La mejor época del año para visitar la laguna es de marzo a julio si uno va buscando la belleza de los majestuosos y gráciles flamencos.
-No dejar de darse una vuelta por el Centro de Visitantes José Antonio Valverde situado al pide la la laguna.
-Existen varios miradores de aves bien construidos y espaciosos.
-Y para reponer fuerzas, tomarse uno de los platos del Tejada en la Plaza de la Constitución  que te dejan bien reconfortado después de un intenso día.
-Y siempre es fantástico compartir afición con otros colegas. Se aprende mucho de ellos.